¿Se pueden llevar las cenizas de un ser querido como equipaje de mano?

Cuando un ser querido fallece, es común que se realice la cremación como opción para el manejo de los restos mortales. Sin embargo, surgen muchas dudas sobre qué hacer con las cenizas una vez entregadas a la familia. En este artículo, abordaremos la normativa legal relacionada con el transporte y depósito de las cenizas, así como las recomendaciones y requisitos necesarios para viajar con ellas.

El Reglamento de Policía Sanitaria Mortuoria fue aprobado por Decreto 2569/1960 el 22 de diciembre de 1960 con la finalidad de consolidar en un solo texto legal las disposiciones sanitarias relacionadas con los servicios mortuorios. Antes de la promulgación de la Ley de Bases de Sanidad Nacional el 25 de noviembre de 1944, se habían dictado múltiples disposiciones sanitarias en este ámbito.

El Reglamento de Policía Sanitaria Mortuoria aborda diferentes aspectos relacionados con la salud pública y los servicios mortuorios. En particular, se refiere a los traslados, inhumaciones, exhumaciones y embalsamamientos de cadáveres.

En este contexto, el artículo 53 del Decreto 2269/1974 de 20 de julio, por el que se aprueba el Reglamento de Policía Sanitaria Mortuoria establece:

«Las cenizas resultantes de la cremación serán colocadas en estuches de cenizas, figurando en el exterior el nombre del difunto. Dichos estuches podrán ser objeto de traslado o depositados en el propio cementerio. A este efecto, los cementerios dispondrán de una zona en tierra o en nichos para la colocación de los estuches de cenizas mortuorias.

El transporte del estuche de cenizas o su depósito posterior no estarán sujetos a ninguna exigencia sanitaria.«

Viajar con las cenizas en avión

Si se planea transportar las cenizas en avión, es fundamental tomar en cuenta las políticas y regulaciones de la aerolínea. La mayoría de las compañías aéreas permiten llevar las cenizas como equipaje de mano, sin incurrir en cargos adicionales. No obstante, se deben cumplir ciertos requisitos, como el uso de una urna funeraria adecuadamente cubierta y protegida contra roturas. En caso de no cumplir con estos requisitos, las cenizas deberán transportarse en la bodega del avión.

Es recomendable llevar el Certificado de Defunción e Incineración como respaldo documental, ya que las autoridades pueden solicitarlo durante el proceso de viaje. Si las cenizas se transportarán a otro país, es aconsejable consultar previamente con el Consulado del país de destino para conocer los requisitos específicos.

Es importante tener en cuenta que cada aerolínea tiene sus propias políticas al respecto, por lo que en otros países, diferentes a España, es posible que solo se permita el transporte de urnas funerarias en la bodega de carga.

Depósito de las cenizas: opciones y consideraciones legales

Una vez entregadas las cenizas a la familia, es necesario tomar decisiones sobre su depósito. La normativa autonómica regula los aspectos legales relacionados con la sanidad mortuoria hasta el momento de la entrega de las cenizas. En este punto, la única prohibición expresa es el depósito en la vía pública, pero no existen exigencias sanitarias adicionales.

Sin embargo, debido a la falta de una normativa estatal única y homogénea sobre este tema, la interpretación de las normas queda en manos de las normativas autonómicas y las ordenanzas municipales, que pueden variar en cada región. Estas normativas suelen abordar aspectos específicos, como los requisitos para el uso de columbarios, nichos o sepulturas en los cementerios.

Cementerios y lugares específicos

Los cementerios suelen contar con lugares específicos para depositar las urnas con las cenizas. Los columbarios son espacios destinados a albergar urnas funerarias con características especiales de conservación. Además, dependiendo de los reglamentos de cada cementerio, es posible depositar las cenizas en nichos o sepulturas.

Esparcimiento de las cenizas

Otra opción que algunas familias consideran es el esparcimiento de las cenizas en el mar u otros lugares simbólicos de relevancia familiar o sentimental. Sin

embargo, es importante tener en cuenta que las normativas autonómicas y locales no permiten depositar la urna con las cenizas en cualquier lugar deseado. La regulación se centra más en el esparcimiento de las cenizas en sí, en lugar del depósito de la urna. Sin embargo, existen casos en los que se permiten urnas biodegradables diseñadas específicamente para este propósito, las cuales no causan daño al medio ambiente. No obstante, incluso en zonas de playa, es posible que no todas las urnas sean biodegradables y que el mar devuelva las urnas con las cenizas del difunto.

El esparcimiento de cenizas en el mar, ya sea con urna biodegradable o sin ella, también está sujeto a regulaciones específicas en muchas localidades costeras. El vertido de residuos no autorizados en la playa o en el mar suele considerarse una infracción leve, y las ordenanzas municipales establecen sanciones administrativas al respecto.

Ante estas situaciones, han surgido emprendedores que buscan cumplir los deseos de las familias de manera legal. Algunas empresas cuentan con embarcaciones autorizadas por la administración para el esparcimiento de cenizas en el mar, cumpliendo estrictamente las distancias establecidas por la ley. Estas empresas brindan opciones que incluyen ceremonias religiosas o no, e incluso ofrecen una carta náutica que indica la ubicación exacta del lugar destinado al esparcimiento. Cabe mencionar que para depositar las cenizas en el mar, es imprescindible contar con una autorización expresa otorgada por el Ministerio de Fomento a través de la autoridad marítima competente (DGMM).

Autoría


Crea un sitio web o blog en WordPress.com

A %d blogueros les gusta esto: