Plazo para reclamar una indemnización por accidente laboral

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Plazo para reclamar una indemnización por accidente laboral

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Plazo para reclamar una indemnización por accidente laboral

El derecho a una indemnización en caso de accidente laboral o enfermedad profesional es un aspecto crucial en el ámbito del derecho laboral. Los trabajadores tienen el derecho fundamental de recibir una compensación por los daños y perjuicios que puedan sufrir en el desempeño de sus funciones cuando exista negligencia o responsabilidad por parte de la empresa. En este artículo, nos centraremos en el plazo que tiene el trabajador para reclamar esta indemnización.

El plazo establecido por el Estatuto de los Trabajadores

El artículo 59 del Estatuto de los Trabajadores establece de manera precisa el plazo dentro del cual un trabajador puede solicitar una indemnización. De acuerdo con dicho artículo, el plazo para solicitar la indemnización es de un año desde el momento en que el trabajador pudo haber realizado la reclamación. Por lo tanto, es crucial determinar cuándo se considera que se pudo haber hecho la reclamación, ya que este es el punto de partida para el cómputo del año.

Inicio del plazo: conocimiento del alcance de los daños

En términos generales, el plazo comienza a contar cuando el trabajador tiene conocimiento completo del alcance de los daños físicos y patrimoniales ocasionados por el accidente o enfermedad laboral. Esto significa que, si el trabajador no tiene un entendimiento completo de los perjuicios sufridos, no puede cuantificarlos y, en consecuencia, no puede reclamarlos.

En el contexto de daños personales relacionados con la salud, el plazo no inicia mientras el trabajador esté recibiendo tratamiento médico, conocido como el «tiempo de curación». El día inicial del plazo se establece cuando se alcanza la estabilización lesional, es decir, cuando se pueden determinar las secuelas y el alcance de los perjuicios físicos sufridos. Este punto de inicio nunca ocurre mientras el trabajador esté de baja médica como resultado del accidente de trabajo o enfermedad profesional. En consecuencia, el plazo de un año comenzará, como mínimo, a partir del día en que el trabajador reciba el alta médica.

Por otro lado, para reclamar una indemnización por daños y perjuicios, es necesario conocer el perjuicio sufrido, lo que implica identificar las secuelas que persisten después de haber recibido el tratamiento médico correspondiente. Para evaluar adecuadamente las secuelas, es necesario recibir el alta médica, ya que estas representan limitaciones físicas, psíquicas o estéticas de carácter permanente.

En este contexto, una secuela se define como una dolencia que ya no es susceptible de curación o mejora después de haber recibido el tratamiento rehabilitador correspondiente, y solo se puede gestionar mediante tratamientos paliativos para aliviar el dolor o las limitaciones causadas por el accidente o enfermedad. Por ejemplo, un trabajador que sufre la rotura de un tobillo necesitará un período de curación, y si no recupera completamente la movilidad, se considerará una secuela. La determinación precisa de qué constituye una secuela y su valoración es un proceso médico y, en ocasiones, puede ser objeto de controversia en cuanto a cuándo una dolencia temporal se convierte en una secuela y comienza a computar el plazo para reclamar.

Interpretación de las reglas de prescripción

De acuerdo con la jurisprudencia consolidada, las reglas sobre prescripción deben aplicarse de manera restrictiva para no perjudicar a los trabajadores. En este sentido, se busca proteger los derechos de los trabajadores en situaciones de accidentes laborales o enfermedades profesionales.

Inicio del plazo y daños económicos

En lo que respecta a los daños económicos, el plazo para reclamar depende del perjuicio sufrido por el trabajador. En el caso de que se le otorgue una incapacidad permanente, el plazo comenzará a contar desde que se le conceda esta incapacidad, ya sea a través de un proceso judicial o administrativo.

Además, en situaciones en las que el trabajador solicite un recargo de prestaciones, el plazo no comenzará a correr hasta que la decisión judicial o administrativa de dicho procedimiento de recargo sea firme. Es importante comprender que la indemnización que busca el trabajador comprende tanto los daños físicos (tiempo de curación y secuelas) como los daños económicos, que incluyen la pérdida patrimonial sufrida debido a la incapacidad para percibir ingresos, conocida como «lucro cesante».

Cómo paralizar la prescripción

La paralización de la prescripción se logra a través de cualquier tipo de reclamación dirigida a la empresa en busca de una indemnización. Se recomienda que esta reclamación se realice de una manera que se pueda documentar de manera efectiva, como a través de un burofax o mediante la presentación de una papeleta de conciliación laboral que solicite la indemnización por daños y perjuicios correspondiente a la empresa o empresas responsables.

Es importante tener en cuenta que la presentación de una denuncia en inspección de trabajo no paraliza la prescripción, por lo que lo más adecuado es iniciar las acciones legales correspondientes.

Recargo de prestaciones

El recargo de prestaciones es una sanción que se impone al empleador cuando no ha cumplido con las medidas de prevención de riesgos laborales y esta falta de prevención ha causado directamente el accidente de trabajo o la enfermedad profesional. Debe existir una relación causal entre la falta de medidas de seguridad y el accidente laboral sufrido por el trabajador.

La solicitud del recargo de prestaciones no afecta a los daños físicos sufridos por el trabajador, pero puede tener un impacto en los daños económicos, ya que si se concede un recargo de prestaciones, la pensión que el trabajador reciba en caso de incapacidad permanente será mayor. En este sentido, la presentación de un recargo de prestaciones, ya sea en vía administrativa o judicial, paraliza el plazo de prescripción de un año para reclamar la indemnización correspondiente. Esta paralización se extiende hasta que la resolución administrativa o judicial sea firme.

Procedimientos penales

Cuando se inicia un procedimiento penal, el plazo para reclamar daños y perjuicios no comienza a correr hasta que finaliza el proceso penal. La conclusión del procedimiento penal puede ser resultado de una sentencia, el sobreseimiento del caso o la retirada del perjudicado del procedimiento penal.

Responsabilidad de varias empresas

En situaciones donde se plantea la posibilidad de la responsabilidad de múltiples empresas, como en el caso de subcontratación en una obra, es esencial demandar a todas las partes involucradas desde el inicio. La reclamación de una indemnización contra la empresa empleadora no interrumpe la prescripción de un año para demandar a otras empresas que puedan tener responsabilidad.

La jurisprudencia ha establecido que en casos de responsabilidad compartida, la prescripción no se detiene simplemente por iniciar una reclamación contra otro responsable. Esta interpretación se basa en la distinción entre responsabilidad propia y responsabilidad impropia, donde la última se deriva de un comportamiento negligente.

Jurisprudencia relevante

En relación con lo expuesto en este artículo, es importante mencionar la jurisprudencia que ha tratado estos temas. Las sentencias del Tribunal Supremo de noviembre de 2019, julio de 2015 y julio de 2006 resaltan varios puntos cruciales:

  1. La interpretación de las reglas de prescripción debe ser restrictiva.
  2. El plazo de un año según el artículo 59 del Estatuto de los Trabajadores rige la prescripción.
  3. El inicio del cómputo se produce con la firmeza de la resolución (administrativa o judicial) que determina las consecuencias del accidente.
  4. La reclamación del recargo de prestaciones y la responsabilidad indemnizatoria tienen diferencias notables, pero la relación de causalidad puede afectar a ambas.
  5. La presentación de una demanda de recargo de prestaciones por parte del trabajador interrumpe el plazo de prescripción.
  6. La resolución judicial que desestima la demanda de la empresa no afecta al plazo de prescripción de la acción por daños y perjuicios del trabajador.

Como ejemplo de la interpretación flexible de las reglas de prescripción, se puede mencionar la Sentencia del Tribunal Supremo de octubre de 2022, en la que un trabajador presentó una demanda 15 años después del reconocimiento de una enfermedad profesional. El tribunal consideró que el plazo comenzó con la declaración de gran invalidez.


La información proporcionada en este artículo sobre el plazo para reclamar una indemnización por accidente laboral. Por lo tanto, no debe ser considerada como sustitutiva de la asesoría legal personalizada. Contamos con un equipo de abogados especializados en diversas ramas del derecho, incluyendo civil, penal, laboral y extranjería. Si desea profundizar en alguna cuestión legal o necesita asesoramiento personalizado, le invitamos a contactarnos a través de nuestro enlace. Estaremos encantados de atenderle y brindarle la asistencia legal que requiera.


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