Los conflictos laborales son una realidad común en el mundo empresarial. Regularmente, escuchamos sobre empresas que contratan detectives privados para monitorear a sus empleados. Sin embargo, ¿es una práctica solo reservada para los empleadores? La respuesta es no. Los trabajadores también tienen la potestad de contratar servicios de investigación privada en ciertos escenarios. Analicemos cómo los trabajadores pueden beneficiarse de la contratación de un detective privado y cómo funciona de acuerdo con la Ley de Seguridad Privada.
Legitimación para Contratar un Detective Privado
El artículo 48 de la Ley de Seguridad Privada estipula que los servicios de investigación privada a cargo de detectives privados consisten en la obtención y aportación de información y pruebas sobre conductas o hechos privados en el ámbito económico, laboral, mercantil, financiero y otros. Es importante destacar que esta ley no especifica que solo los empleadores puedan contratar estos servicios. Tanto los empleadores como los trabajadores están legitimados para hacerlo si lo consideran necesario para un pleito laboral.
Valoración de las Pruebas
Al contratar un detective privado, los trabajadores pueden obtener pruebas que podrían ser cruciales para su caso. La relevancia y utilidad de estas pruebas pueden variar, así como el coste del detective. No obstante, si un trabajador tiene indicios de irregularidades por parte del empleador, como el uso fraudulento de recursos de la empresa o la declaración de información económica falsa, podría considerar contratar estos servicios.
Casos donde un Detective puede ser Útil para el Trabajador
Despidos y Expedientes de Regulación de Empleo
Un ejemplo común donde un detective privado puede ser de utilidad para un trabajador es en el caso de despidos o expedientes de regulación de empleo basados en causas económicas falsas. A menudo, los empleados tienen conocimiento interno de las prácticas de la empresa y saben si se están llevando a cabo acciones ilícitas. En tales escenarios, un detective privado puede ayudar a recopilar pruebas para impugnar la justificación económica del despido.
Desmontando Pruebas de la Empresa
Es importante tener en cuenta que en un despido por causas económicas, la empresa debe demostrar la validez de estas causas. Si un trabajador puede presentar pruebas o indicios de que la información contable de la empresa es poco fiable, puede socavar la principal defensa de la empresa y potencialmente resultar en que el despido sea declarado improcedente, lo que podría aumentar significativamente la indemnización.
Detectando Ingresos y Gastos Falsos
Un detective privado puede obtener pruebas de ingresos no declarados y gastos falsamente atribuidos a la empresa. Esto no implica que el detective analice la contabilidad, sino que podría, por ejemplo, monitorear una empresa y registrar operaciones en efectivo que no se contabilizan o seguir a los dueños de la empresa para documentar el uso personal de recursos de la empresa.
Consideraciones Legales en la Obtención de Pruebas
Es fundamental que las pruebas obtenidas por el detective se realicen de manera legal, respetando los derechos fundamentales de laspersonas involucradas. La responsabilidad de asegurar que las pruebas sean obtenidas legalmente recae en el detective contratado.
Respeto a la Privacidad y Derechos Fundamentales
Al igual que cuando un detective graba a un empleado, el detective debe tener cuidado de no violar derechos como la privacidad. Los métodos de obtención de pruebas deben estar en línea con la legislación vigente. En caso contrario, las pruebas podrían ser consideradas inválidas en un procedimiento judicial.
Empoderamiento del Trabajador en el Ambito Laboral
Los trabajadores, al igual que los empleadores, deben tener conocimiento de sus derechos y opciones disponibles en caso de conflictos laborales. La contratación de un detective privado puede ser una herramienta valiosa para nivelar el campo de juego y asegurar que se haga justicia.
