En general, la respuesta a esta pregunta depende de muchos factores, incluyendo la naturaleza del delito, la jurisdicción de los países involucrados y las leyes aplicables. Por ejemplo, si una persona comete un delito en un país que no es su lugar de residencia y luego regresa a su hogar, es posible que sea perseguida y juzgada en su país de origen. Sin embargo, si el delito cometido es considerado un crimen internacional, como el terrorismo o el tráfico de personas, es posible que la persona sea perseguida y juzgada en cualquier país que tenga jurisdicción sobre el delito.

Además, existen tratados internacionales como la Convención de extradición, que establece un acuerdo entre países para extraditar a personas acusadas de cometer delitos en otro país. De esta manera, si una persona es acusada de cometer un delito en otro país, es posible que sea extraditada a ese país para ser juzgada allí.

Sin embargo, es importante señalar que no todos los países tienen acuerdos de extradición con otros países y que, en algunos casos, es posible que una persona no sea extraditada a otro país si se considera que su derecho a un juicio justo no será respetado allí.

En conclusión, la respuesta a la pregunta de si una persona puede ser perseguida por un delito cometido en otro país es compleja y depende de muchos factores. Sin embargo, existen leyes y tratados internacionales que buscan abordar esta cuestión y garantizar que las personas acusadas de cometer delitos en otros países reciban un juicio justo.